A través del método de superposiciones de vidrios se pueden obtener resultados muy interesantes.
El resultado no es el equivalente a mezclar dos vidrios en un recipiente y después aplicar la mezcla de ambos sobre una pieza. Una superposición implica que haya un vidrio encima de otro. De hecho, el resultado puede variar significativamente dependiendo cuál de los vidrios va encima o debajo.
En general yo opto por sobreponer vidrios secos debajo o encima de vidrios que han fundido bien.
Los vidrios secos (que no han terminado de fundir) fundirán por interacción durante la quema con los vidrios que si funden. Es importante tener en cuenta el grosor total de ambos vidrios. Si la suma de las capas es demasiado gruesa, el vidrio resultante puede terminar separándose en ciertas partes de la pieza como ocurrió en la muestra V14 bajo RS7.
A continuación presentamos algunas muestras:
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